jueves, 18 de junio de 2009

PRIMERA MEMORIA DE LA RESISTENCIA


PRIMERA MEMORIA DE LA RESISTENCIA
COORDINADORA ESTUDIANTIL UNIVERSITARIA

Compañeras y compañeros estudiantes,
Tanto a los que fueron, los que son y los que desearían serlo.

Les hablamos desde el frio de la baldosa que nos sirve como cama, desde la unidad espontanea y la necesidad burlada, desde una prisión que con organización hemos hecho escuela, casa y barricada. En estos más de 15 días de trinchera, la Asamblea Independiente de Estudiantes de la Facultad de Comunicación Social escribe a ustedes estas palabras, que más que resumir nuestra lucha, buscan alzar un grito de rebelde hastío en medio de la apatía e indiferencia de toda una época decadente y enfermiza.

Unas reuniones, unas asambleas, unos piquetes, un paro, una huelga. Todo se construyó desde abajo, desde el descontento de varios estudiantes ante el cobro excesivo de matrículas, ya que desde el 30 de octubre de 2008 regía la “gratuidad” de la educación pública hasta tercer nivel.

La organización de esos días llevó a la unión de la Escuela de Sociología y CC.PP. y la Escuela de Trabajo Social, así vio la luz la Coordinadora Estudiantil Universitaria, CEU, en la cual ponemos toda nuestra esperanza: que la Universidad se construya desde abajo y para todos los explotados.

El malestar se hizo sentir, pero el poder es egoísta y lo único que se recibió fue la eliminación de pequeños rubros que no tenían razón de ser, y una reforma al reglamento de rebajas y exoneraciones arancelarias presentada por el Decano de nuestra Facultad, la que no vino a ser más que una beneficencia.

Esto quiso dejar de lado el importante debate que se abrió desde el inicio sobre la infame “Gratuidad de la Educación” con una “responsabilidad académica” la misma que fue regulada de manera perjudicial para el estudiantado por el Decreto Ejecutivo 1437, además de la “autonomía responsable” y un nuevo proyecto de ley de educación superior, creado por la SENPLADES e irónicamente construido desde el punto de vista de la universidad privada. Todos estos temas apuntan a configurar a nuestra Universidad Central y las universidades públicas del país como una fábrica de fuerza de trabajo especializada, tecnificada y barata, acorde con las exigencias del mercado depredador neoliberal, desde una perspectiva racista, clasista y sexista.

La flamante administración de nuestra institución que prometía construir una “Nueva Universidad”, ratificó el 7 de abril de 2009 el sistema arancelario vigente desde el 2004, el cual alimentaba a los grupos de poder y movimientos políticos parásitos dentro de la Universidad. Uno de nuestros pedidos concretos, el más urgente, era una prórroga que suspenda el pago de matrículas hasta que entre en vigencia un nuevo sistema económico y académico donde solo sea cobrado la reprobación de las materias y no todo el nivel o semestre, un sistema que tome en cuenta al estudiante, no como materia prima que deba tecnificarse y especializarse apresuradamente o como mano de obra barata calificada, sino como seres humanos insertos en un contexto social que demanda e impone otras obligaciones que en varias ocasiones no permite rendir óptimamente a nivel académico. Además, el rendimiento académico depende también de los docentes; sector que necesita de una mayor asignación de presupuesto y, a su vez, de una mayor exigencia pedagógica; mediante esto apuntamos a su evaluación, a la designación de los profesores mejor calificados en Centros de Investigación (y, ¿por qué no?, a los estudiantes mejor calificados); al aumento de recursos para el área mencionada, para la infraestructura, al incentivo económico a los mejores profesores, etc.

Así, nuestros reclamos se concatenan. No estamos en la fría baldosa por mera afectación económica, estamos alzando nuestros puños y gritos desde el suelo porque estamos cansados de ser pisoteados, porque este problema responde a una gran estructura, a un sistema, que debe ser cambiado: los gobiernos que dicen representarnos a todo nivel e instancia (aso-escuelas, decanatos, rectorados, presidencias de la república), los intereses detrás de estos y el adormecimiento del mundo actual, cómodo y apático, que se deja explotar, manipular y engordar como buen rebaño del poder capitalista.

Queremos dejar en claro que nuestra actividad no busca ser plataforma política de ningún movimiento ni supuesta representación que no competa al poder estudiantil. No respondemos a ninguna práctica política que pretenda secuestrar la educación pública. Por eso declaramos la independencia política del movimiento estudiantil. Nuestro desvelo, nuestro cansancio, nuestra lucha no busca figurar, busca despertar la participación de todos en la construcción de una Universidad Pública al servicio del pueblo, y no a servicio del capital internacional y, ¿por qué no?, una nueva sociedad.

“No pensamos dejar las cosas tal como las encontramos”

ASAMBLEA INDEPENDIENTE DE ESTUDIANTES FACSO
COORDINADORA ESTUDIANTIL UNIVERSITARIA

1 comentario:

Anónimo dijo...

Compas revisarán los audios y periódicos del Comercio de hoy, 18 de junio...


ya era hora de que dejen el lenguaje formalon, pseudo-legal... jaja, todo bien!!!
el texto es hermoso, llega, la construcción de este camino cada vez es más claro.

espero que a lxs demas estudiantes que no participaron activamente les llegue esta 'memoria de la resistencia', es un tema que nos compete a todxs como estudiantes, como parte de un territorio mediado por poderes y sus vicios, es necesario y urgente pensarse la educacion publica. nos compete a todos al posiblemente perder absolutamente la -poca- autonomia que nos queda.

si alguien kiere sacar el carton x sakar mejor vaya a las universidades privadas. la cuestion en la u publica es muy distinta.
que se mantenga la resistencia, la lucha estudiantil, ahora si desde las bases...

mantenganse cumpas.
salud y libertad!